viernes, 15 de marzo de 2019

No escribo versos porque no me ruge el estómago (antipoema)

;escribo porque la hoja en blanco es otro parque en el que pueden jugar mis criaturas; pero antes diré por qué no escribo versos: no escribo versos porque mis guías antes de convertirse en escritores no se perdieron ni un detalle del mundo que ahí fuera ríe y jode mientras escribo esto; porque cada vez que cuento las sílabas de un fracasado verso los números se me antojan rayos de sol que mi piel joven se está perdiendo; porque Lou Reed no para de cantarle al vicio ahí atrás en el altavoz que chilla guitarras como motocicletas ahí atrás; porque el verso no admite ideas sino palabras y sabores y mi musicalidad es más bien callada; porque no me ruge en las tripas como a Bukowski; porque no sufriría ni moriría siquiera si me prohibieran escribir de por vida; mejor así tal vez; porque sí que mataría al que quisiera robarme mis aventuras; y porque menos mal que la vida no me ha puesto en el estado colindante del poeta;

;sin embargo me noto una diferencia muy grande con respecto a los escritores que conozco de mi edad; soy paciente de mi carencia de sacrificio y de entrega y por ello asumo la derrota que no es derrota y no poseo ambición en absoluto; pero escribo como si Narciso se fotografiara su reflejo en la charca y dijera «muy bien este soy yo»; escribo porque a veces pienso en el viejo que seré y en lo que me gustaría que de vez en cuando volviera a recorrer estos parajes muertos de vida y me quisiera tanto como yo le quiero a él; escribo también por supuesto al niño que fui para que me sonría con la simpática carita que tenía; escribo para ordenar las complejidades de la vida y desbaratar aquellas sencillas; escribo para preservar y no caer al vacío; escribo para conservar y para hablar conmigo cuando no sea yo; y escribo sobre todo; contra el tiempo; contra la finitud; contra la repetición de otras vidas que es mi vida; 

el escritor es un cazador insomne

con respecto a lo de ser escritor pues antes pensaba que el oficio te lo daba una mirada única y es cierto que no basta con tratar de poner ...